Los niños europeos pasan aproximadamente 200 días al año en sus escuelas primarias. Aunque gran parte del mundo no tiene esa misma carga lectiva, después de la propia casa, generalmente los niños y adolescentes pasan la mayor parte del tiempo en instituciones educativas. Pueden ser lugares de aprendizaje, juegos y convivencia. Y, por más triste que pueda ser, también pueden ser los únicos lugares seguros y de alimentación para niños que viven en ambientes de abandono, hambre y violencia.
A través de una extensa investigación en el Reino Unido, se concluyó que las características físicas de las aulas explican el 16% de la variación en el progreso del aprendizaje a lo largo de un año. Es decir, mientras mejor diseñada sea la sala de clase, mejor es el desempeño académico de los niños. Según el estudio, los factores que más influyen son la luz solar, la calidad del aire, la acústica, la temperatura, el diseño del espacio y la estimulación en su interior.
Con la diversidad de climas alrededor del mundo, alcanzar todos estos parámetros puede ser difícil en algunos casos, ya que las estrategias bioclimáticas adecuadas para cada contexto pueden definir el éxito o el fracaso del proyecto educativo. Seleccionamos algunos proyectos en diferentes climas y contextos, para obtener útiles lecciones de diseño.
Climas cálidos y secos
En los climas cálidos y secos, es imprescindible mitigar los efectos de la amplitud térmica (diferencia entre la temperatura del día y la noche). Por lo tanto, es importante utilizar materiales de gran inercia térmica, haciendo que el calor absorbido durante el día sea liberado durante la noche. Otra cuestión importante es encontrar el equilibrio entre la máxima iluminación y la mínima entrada de radiación solar, buscando proteger los edificios del sol intenso, a través de brises soleil, persianas, pantallas, o incluso con vegetación.
Escuela Primaria en Gando / Kéré Architecture
Al despegar la cubierta de los gruesos muros de ladrillos, Francis Kéré proporciona ventilación y una iluminación interior agradable, utilizando persianas.
Aula Multifuncional Mazaronkiari / Marta Maccaglia + Paulo Afonso
La permeabilidad de las persianas de madera, sumado a sus aleros pronunciados, hacen de esta sala un buen ejemplo de arquitectura que se adapta al entorno.
Escuela Comunitaria Primaria para niñas / Orkidstudio
Además de utilizar la inercia térmica, la ventilación cruzada y el efecto chimenea, la conformación de patios interiores proporciona interesantes espacios de convivencia.
Pabellón Kalì / Irene Librando and Nadia Peruggi
"Las paredes de tapia, junto al techo alto y las pantallas de madera, no sólo dan forma al aula, sino que son cruciales para su microclima. Incluso cuando llueve en la estación seca, las temperaturas en la región de Ashanti oscilan entre 20 y 40 grados Celsius. Permitir que los niños estudien en un espacio fresco, aún en las horas más calientes del día, es extremadamente importante para su concentración".
Climas cálidos y húmedos
En los climas cálidos y húmedos, la variación de temperatura entre el día y la noche son mucho menores, y la inercia térmica no es una estrategia adecuada. Son lugares donde el clima sofoca y las lluvias son intensas. Debido al calor, es importante detener la radiación directa. La ventilación abundante es vital para disipar el calor y reducir la humedad. Muros perforados, persianas y cubiertas que entregan sombra y protegen de las lluvias mejoran las condiciones de los espacios interiores.
Colegio Pies Descalzos / Giancarlo Mazzanti
Los diversos filtros del proyecto, en sus fachadas y cubiertas, sumados a los materiales ligeros y los volúmenes estrechos, enfrentan la radiación y permiten la ventilación de esta escuela en Colombia.
Institución educativa rural Siete Vueltas / Plan:b arquitectos
La cubierta ligera y los muros perforados permiten un flujo de aire ininterrumpido en la edificación.
Climas fríos
Cuando el clima es frío, la principal preocupación recae en mantener el calor en el interior de la edificación. Se observan edificaciones más robustas, con más masa en sus muros y un mejor aislamiento térmico. Las aberturas son un punto crucial. Es importante que permitan la entrada de luz y calor, pero sin convertirse en puntos de fuga del calor.
Escuela “la ruche” Perthes-en-Gâtinais / TRACKS
En esa escuela en Francia, grandes ventanales y aberturas zenitales hacen que los interiores se inunden con luz difusa.
Creche HN / HIBINOSEKKEI + Youji no Shiro
Debido al frío, durante gran parte del año, este proyecto trae el exterior hacia adentro. Los árboles y una buena cantidad de iluminación natural conforman espacios extremadamente agradables.
Kindergarten Nová Ruda – Vratislavice nad Nisou / Petr Stolín Architekt
Esta guardería en la República Checa trabaja con la translucidez del policarbonato en su fachada, dispuesto sobre espesas paredes aisladas térmicamente.
Climas agradables
Cuando el clima no es extremo, los arquitectos tienen una mayor libertad proyectual en la elección de los materiales y estrategias.
Centro de Cuidado de Niños chrysalis / Collingridge and Smith Architects
La organización alrededor de dos enormes árboles conforma los ambientes escolares en este proyecto en Nueva Zelanda.
Escuela Beacon / Andrade Morettin Arquitetos + GOAA - Gusmão Otero Arquitetos Associados
Aprovechando la estructura de galpones industriales en desuso, la intervención crea espacios semi abiertos, que borran los límites entre el exterior y el interior.
Escuela El Til·ler / Eduard Balcells + Tigges Architekt + Ignasi Rius Architecture
Los arquitectos aprovecharon la racionalidad estructural de las aberturas para crear interesantes espacios de convivencia y estar para los niños, concordantes con sus diferentes escalas.